Los avances en el fortalecimiento de la seguridad privada hacen eje en dos aspectos clave, como son la profesionalización de los trabajadores y la regularización de las firmas que prestan el servicio. Desde el ministerio de Seguridad destacaron el impacto que genera el sector en la creación de empleos y el rol que cumple en materia de seguridad ciudadana.
La provincia del Neuquén trabaja en la profesionalización de los trabajadores y la regularización de las empresas de seguridad privada. Como parte de una política activa de regulación y control del ministerio de Seguridad, el sector exhibe una evolución significativa durante el período 2024-2025.
Uno de los hitos de este período fue la habilitación del primer Centro de Capacitación para el dictado del “Curso Básico de Vigilador”. Este avance no solo profesionaliza la actividad, sino que garantiza una formación homologada y de calidad para quienes prestan servicios en el ámbito de la seguridad privada.
Para el dictado de esta formación, que fue diseñada conforme lo establecido por la Ley Provincial Nº 2772 y su decreto reglamentario, los ministros de Seguridad, Matías Nicolini y de Trabajo y Desarrollo Laboral, Lucas Castelli firmaron semanas atrás un acta de colaboración con el Instituto Terciario Séneca.
El curso implica una duración de 100 horas -80 virtuales y 20 presenciales- e incluye contenidos vinculados a aspectos legales y normativos del sector, procedimientos ante situaciones críticas, primeros auxilios, RCP, manejo y prevención de incendios. En línea con la normativa vigente, no contempla el uso ni manejo de armas de fuego.
“El desarrollo profesional del personal de seguridad privada es parte del plan integral de seguridad pública que impulsamos desde el ministerio. Nuestro objetivo es brindar herramientas concretas para que más neuquinos puedan acceder al empleo formal”, indicó Nicolini.
La regularización del sector
Otro de los ejes de la política provincial de fortalecimiento del sector es la regularización. Al inicio de la actual gestión, la provincia contaba con 31 empresas de seguridad habilitadas. Para 2025, ese número se ha elevado a 60 firmas formalmente registradas, lo que representa un incremento del 93%, acompañado por una clara decisión de ordenar y supervisar la actividad bajo estándares normativos más estrictos.
En paralelo, el registro de personal habilitado también muestra un crecimiento sostenido. Mientras que en 2024 había 3.500 vigiladores registrados, en 2025 la cifra asciende a 5.377 trabajadores, consolidando un crecimiento del 53% en el empleo formal dentro del sector.
En cuanto a los ingresos generados por la actividad, se registró un notable crecimiento en los recursos recaudados por el Estado provincial. A julio de 2024, los ingresos por multas, habilitaciones y tasas administrativas alcanzaban los 76.483.394 pesos. Para julio de 2025, la cifra escaló a 184.555.694 pesos, marcando un aumento interanual del 140%. Esto permite reforzar los mecanismos de fiscalización, capacitación y control, y contribuye al fortalecimiento integral del sector.
Desde el ministerio de Seguridad destacaron que estos avances responden a una decisión política concreta de poner en valor un sector clave, tanto por su impacto en la generación de empleo como por su rol en la seguridad ciudadana.